/EL BANDIDO

EL BANDIDO

EL BANDIDO

            El “Bandido” es el nombre del barco en el cual el Jefe de Gabinete de Ministros bonaerense consumaba sus costosas tropelías de vigoroso seductor, gastador compulsivo en desbordes de regalos, ofrendas y derroches amorosos.

            Notable denominación verbal para el crucero que se identifica con la condición del ocasional navegante que acude en aras de diversión y esparcimiento con su inefable y singular acompañante.

            Ironías del destino que califican con similar designación la nave y su visitante.

            Particular sinonimia por lo especial y distinguido del aserto. Alude a un incuestionable significado.

            Los efectos de la exposición mediterránea de la alegre pareja eyectaron de forma súbita al fugaz marinero del círculo aúlico de la gobernación, vedaron su participación electoral, le desplomaron de toda cartelería y lo desterraron a un fatal ostracismo a la par que llueven denuncias de todo tipo y especie.

            Los jueces fatigarán  oficinas de migraciones, salidas de aviones de línea y privados en la búsqueda de la feliz pareja y su derrotero.

            También los muy curiosos triangularán vía Uruguay para despejar un itinerario europeo con escalas.

            Malas noticias para los próximos días si existiera algún magistrado atento, perspicaz, laborioso y urgido.

            Cristina no tiene suerte con sus elecciones y no para de recibir mandobles de sus preferidos: Boudou, Fernández y ahora Insaurralde.

            Los distingue la falta de gratitud y consideración con la electora. 

            El desconsolado, sorprendente y sorprendido aprendiz de escarceos y amantes mediáticas, resulta fulminado por sus pares y ganado por un abrupto silencio.

            Los hechos constituyen una brutal y grotesca exhibición de abusos y excesos sin límite, altar en que se consuma la degradacion de la vida política del oficialismo.

            Perdido en sus devaneos sexuales y libaciones expone de manera circense un escándalo que se integra a los reiterados y persistentes en nuestro escenario político.

            El Bandidaje como circunstancia de existir y actuar bandidos en un sitio es un maridaje perfecto que se propala de distintas formas.

            El paseo mediterráneo expone para todos los sentidos, en múltiples formatos, audios, fotos, videos, el grado de desmesura e impunidad con el cual despliegan conductas ilícitas.

            No hay lugar para el asombro, sino simplemente se acredita la mera constatación empírica de los hechos y circunstancias que habitan el pensamiento del común de los argentinos.

            La navegación del Bandido debe tener traducción en un nuevo viaje que nos conduzca a otros puertos.